Puertas metálicas se encuentran típicamente en aplicaciones comerciales, pero se pueden colgar en hogares residenciales también. Por lo general, las puertas de metal se utilizan como puertas de seguridad delanteros. Una desventaja de una puerta de metal es el hecho de que comenzará a oxidarse con el tiempo. Cuando esto ocurre, puede reemplazar la puerta de metal o repararlo. Hacer uso de algunos trucos de reparación del cuerpo para restaurar la puerta.
FONDO AHERRUMBRADO
Lo que necesita
Alicates
Atornille arma
Gafas de seguridad
Amoladora
Harapos
Kit de soldadura en frío
Recipiente de mezcla
Espátula
Imprimación de metal
Pincel
Pintura metálica
Tome la puerta de metal de las bisagras con unos alicates para sacar los pernos y / o un desarmador para aflojar las bisagras. Coloque la puerta sobre una mesa o banco de trabajo en un área bien ventilada.
Póngase gafas de seguridad y utilizar un molino para desprender el óxido suelto, moler hasta el metal desnudo. Tenga cuidado al usar la amoladora, manteniendo siempre un agarre firme y nunca tocando la superficie de molienda.
Limpie la puerta de metal hacia abajo con un trapo húmedo para quitar el polvo y permitir que se seque al aire.
Abra un kit de soldadura fría y mezclar partes iguales de acero líquido con el endurecedor en un tazón para mezclar, revolver con una espátula.
Aplicar la mezcla de soldadura en frío a la parte inferior de la puerta de metal donde el óxido se presente con la espátula, luego dejar secar el tiempo indicado por el fabricante.
Aplique una capa de imprimación de metal con un pincel, dejar secar durante tres o cuatro horas, y luego pintar la puerta de metal con una pintura de color a juego y deje que se seque completamente antes de volver a colgar él.
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